martes, 30 de agosto de 2011

CUIDA TU NIÑO INTERIOR


Hola amigos:
últimamente tengo conversaciones muy interesantes sobre las capacidades individuales de cada uno de nosotros. Amigos y conocidos  coinciden en explicarme  que son conscientes de sus virtudes, que cada vez se ven más fuertes para poner en marcha sus capacidades , y entonces..., se les cambia la cara y con ojos tristes y rostro de decepción comentan:
“…Por Más que me esfuerzo no consigo hacerlo cuando me pongo… y otras veces me sale de manera natural…!no entiendo nada!...”
Lo que ellos no saben es que en sus palabras está la solución, que esa  “Sabiduría Innata” que tenemos nos está explicando porqué  fallamos.
Estamos en un  momento en que es imposible negar que cada vez somos más intuitivos y nuestras capacidades para relacionarnos con los demás están mejorando:
- Cuantas veces estamos pensando en alguien y nos llama por teléfono…
-Y cuando te preocupas por algún ser querido que no tienes cerca y al llamarlo te das cuenta que está pasando por un mal momento, sin embargo...¡tú no podías saber qué pasaba!…
-Y cuando te invitan a alguna actividad, y sin saber porqué, no dices que sí a la primera… es cómo si algo te dijera que no vas a poder asistir, que ese día estarás en otra cosa.
-También hay ocasiones en las que estás de muy buen humor ¡con una sonrisa increíble!, y todo el mundo comenta que tienes el guapo subido… Es muy posible que estés conectando con aquellos que estén del mismo humor y disfruten de la misma ilusión por la vida.
Es como si estuviéramos más sensibles a lo que nos rodea y más empáticos a los demás. Son capacidades que se están desarrollando en todos nosotros de forma más o menos intensa. Y ¿Cómo podemos mejorar voluntariamente estas capacidades?
 ¡Haciéndolo de manera natural!
La capacidad de sentir los sentimientos de los demás, de adelantarse a los acontecimientos, de saber lo que piensan las personas ( empatía, intuición, telepatía,…) sólo se puede controlar desde la inocencia de un niño, ellos nacen con esas capacidades en activo pero se pierden con la edad.
Todos tenemos nuestro niño interior y no debemos olvidar todo ese registro de emociones, me refiero a la sinceridad sincera, a la inocencia de los colores, al sentimiento de sorpresa ante una situación, a la alegría por existir, a no juzgar porque las cosas son como son… y sobre todo, a sentirse seguro y no tener miedo.
Para controlar una capacidad psíquica o creativa has de revivir y llenar de amor a tu niño interior. Los ejercicios que quieras realizar los has de vivir como si fuera un  juego infantil, tu concentración ha de tener la calma serena  ¡porque eres capaz!, y tu actitud de amor hacia lo que estás a punto de hacer, porque tú eres luz y tus aprendizajes son tu evolución personal.
Deseo que te des cuenta de lo auténtico y especial que eres y que recuperes la sonrisa de tu niño interior.
Antes de dormir reconforta a tu niño interior con cariño como el adulto en que te has convertido… imagínate abrazándolo con amor y serenidad. Todo está perdonado porque ahora solo hay bondad en el encuentro… imagínate haciéndole cosquillas o revive tu cuento preferido.
 Si tuviste una infancia complicada abraza a tu niño interior con más fuerza y dile con orgullo que eres un héroe más grande y más fuerte, ¡y que ya creciste!, ya pasó..., reconfórtalo, dale amor y seguridad y no te olvides de sonreir. 
 Son solo cinco minutos en la tranquilidad de la noche que te ayudarán a caminar con seguridad y sin miedo durante el día siguiente. INTÉNTALO.
Cuando hayas conectado con la fuerza de tu niño interior, tus proyectos creativos y tus capacidades saldrán sin complejos y podrás controlarlas un poco más cada día.
Recuerda que todos somos valiosos…
Desde mi niña interior os envío Besos de colores y Abrazos con música.

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